Lluvia seca

La lluvia seca supone una oferta de estimulación somática, que consiste en una plancha ligera de la que cuelga material diverso ( telas, plásticos, objetos ensartados), y bajo la cúal se sitúa al niño.

Es una propuesta de actividad muy útil, ya que permite al alumno interactuar con el objeto, sin una atención directa del adulto.

Esta actividad proporciona experiencias somáticas

 (a través de la piel).

En niños con gran inmovilidad, este roce le ayuda a percibir y tomar conciencia de su cuerpo.  

Además incita al movimiento, ya que ante un pequeño movimiento del niño, provocará una respuesta somática en su cuerpo (notará el roce de la lluvia seca sobre su cuerpo). 

Si colocamos pequeñas campanillas, cascabeles, pelotas con sonido... al final del material colgante, proporciona, además del estímulo en su piel, una respuesta acústica que puede incitarle a un mayor actividad.

En niños con más movilidad  favorece el desarrollo de la prensión (el roce de las manos, al agitar los brazos, permite impulsar, agarrar, lanzar...)

Aquí tenéis un enlace donde se explica como construir una lluvia seca. Pulsa aquí.

Ser creativos. Podéis colgar material diverso en cuaquier soporte (rollos de papel de cocina, plásticos de escurridores de platos, cartones, tendederos colgantes con pinzas que suelen vender en los bazares...). Y podéis colgar variedad de materiales:

–    cintas ( elásticas, de plástico, papel, tela...)

–    lanas

–    guirnaldas

–    cuentas

–    macarrones

–    globos

–    cascabeles

–    materiales de un mismo color o de diferentes colores

–    plumas

–    pelotitas

–    -saquitos rellenos de legumbres, arroz